Por que todo esto empieza a cansarme, agotarme, y hartarme. Cansada de sufrir por alguien que ni si quiera sabe que existes, que sabes que ni si quiera merece la pena. Te avisan de que te tienes que olvidar, pero no es que sea tan fácil hacerlo. Es que... hay algo en esa sonrisa, en esa voz, que hace que corran unas pequeñas cosquillas por mi estómago. Como en la montaña rusa, así parecido. Pero da igual, siempre existirá la palabra DISTANCIA. Demasiados kilómetros nos separan, para poder solo vernos una vez. ¿Sinceramente? No merece la pena. Encima él ahora está con otra, seguramente que se haya olvidado de mi, y de todo lo que hemos pasado juntos. Sigo como una tonta pendiente de cada uno de sus movimientos, hablándole cada día, intentando que está puta distancia que nos separa sea mucho menor. Pero todo esto acaba siendo en vano. Así que hoy me levanté, me propuse tener un destino, y próximo destino será... FELICIDAD.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sonrisas falsas