Si me quieres de verdad, demuéstrame que puedes vivir sin mí.

Dejemoslo todo como está. Con ese ritmo que suena a triste, y a añoranza. Con ese olor que huele a dolor, y a sufrimiento. Abandonemos el lugar lentamente, a pasitos de caracol. Vayámonos a un sitio escondido, fuera de la Tierra, del Universo, y de todo lo que conlleva. Vamonos a la galaxia más lejana que exista, y demostremos que somos el nada que dura para siempre.