No me digas que el cielo es el límite, cuando hay pisadas en la Luna.

+¿Ves esa estrella? La de la izquierda del todo, que está casi al lado de la Luna.

-Sí, claro que la veo, ¿por qué lo dices?

+Esa estrella a escuchado cada noche de tu ausencia. Ha notado como miles y miles de lágrimas caían por mi ventana esperando que tu dieras alguna señal de vida, un mensaje, un toque, una llamada... Algo que me demuestre que estás ahí como prometiste aquél día. Ha visto como la miraba fijamente, y susurraba cada una de tus promesas que aún no se han cumplido, por cierto. Ha sentido como cada pétalo de mi margarita iba cayendo uno a uno, y el último que quedó fue el típico de: 'no me quiere.' ¿La ves, no? Ha sido la única que se a enterado de todos mis problemas. Todas las noches brilla, y sabe más que cualquier sabio que tu o cualquiera puedes conocer. Esa estrella, se a convertido en una luz que me guía por las noches en las que tú no estás aquí, conmigo, como ahora.