Noviembre sin ti es sentir que la lluvia me dice llorando que todo se acabó.

Aunque muchos penséis que no, soy una persona normal, cometo errores, me equivoco, rectifico y vuelvo a cometer el mismo error. Vuelvo a caer en la misma piedra sabiendo que me voy a volver a tropezar y caer, pero es que al parecer soy tonta y me gusta estar tirada en el suelo. Creo que si esa piedra no hubiera aparecido en mi camino tu me hubieras empujado a otra peor, haciendo que yo me cayera de nuevo, y de esta vez, creo que no me levantaría por mucho que lo intentara. Ya que todos mis esfuerzos serían en vano. Y ¿qué quieres que te diga? ¿Qué tu eres perfecto y no cometes errores? Perdona que te diga, pero todas las personas los cometemos, unos errores grandes y otros pequeños, pero al fin y al cabo son tropezones en el camino. Son dificultades que te pone la vida. Trampas, y sinceramente... Depende de ti si quieres caer en ellas o no. Pero recuerda, que una vez que caes, de pende de lo grande que sea la piedra, te va a ser difícil levantarte, y te va a costar esfuerzo, lucha, y lagrimas.