Lo sabes, sabes perfectamente que el no es un chico corriente, es diferente a todos las demás, y tu lo sabes. Pero, ¿sabes? tiene cosas también realmente preciosas, bonitas, únicas. Cosas que de ninguno otro has sabido apreciar como lo estás haciendo con él. Como su mirada, sí. No aguantas ni 5 segundos mirándole a los ojos fijamente, necesitas apartar la mirada sí o si. Ya sabes, te sientes tan pequeña cuando te mira, que no sabes ni como reaccionar. Pero también es algo conveniente que te des cuenta de sus indirectas. Como cuando gira ligeramente la cabeza, abre los ojos como un estúpido, los fija en los tuyos, y tu dices ''Es que eres tan idiota...'', y él suelta una carcajada. La que hace que todo tu mundo haga ¡plof! Y le de al pause. Y entonces ahí, sabes que estará a tu lado para siempre.
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Sonrisas falsas